Jesús Criado Mainar

Jesús Criado Mainar es Doctor de Filosofía y Letras (Geografía e Historia, Sección Historia del Arte) desde 1994 con una tesis titulada Las artes plásticas del Segundo Renacimiento en Aragón. Pintura y escultura, 1540-1580 (publicada en 1996).

Desde 1996 ejerce como docente en el Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza, en el que es Profesor Titular desde 2001. También es Consejero del Centro de Estudios Turiasonenses (desde 1985) y del Centro de Estudios Bilbilitanos (desde 2015) de la Institución «Fernando el Católico».

Ha participado en calidad de investigador en seis Proyectos I+D subvencionados de ámbito ministerial y ha formado parte del equipo del Grupo Consolidado HO3 del Gobierno de Aragón «Patrimonio Artístico en Aragón» entre los años 2008 y 2016. También ha sido investigador y miembro del Comité Científico del Projet Pictor. Le métier de peintre en Europe à la Renaissance, promovido por la École Pratique des Hautes Études y subvencionado por la Mairie de Paris entre 2016 y 2020. Forma parte en la actualidad de los consejos editoriales de varias revistas indexadas de Historia del Arte y Humanidades y, además, entre 1993 y 2004 fue director de la revista Tvriaso del Centro de Estudios Turiasonenses de la I.F.C. También ha dirigido o codirigido un total de cuatro tesis de doctorado.

Ha sido comisario de varias exposiciones entre las que recordaremos Cuatro Siglos. IVº Centenario de la fundación del Seminario Conciliar de San Gaudioso de Tarazona (1993, junto a Lucio Lalinde), La cabalgata triunfal de Bolonia y el friso del Ayuntamiento de Tarazona (2000, junto a Gonzalo M. Borrás), Tesoros de Veruela. Legado de un monasterio cisterciense (2006, junto a José I. Calvo) y Milenio. San Atilano y Tarazona. 1009-2009 (2009, junto a Rebeca Carretero). Ha participado en numerosas reuniones científicas y congresos, colaborando también en la organización de varios de ellos, caso del Simposio Internacional sobre arquitectura jesuítica (2012, junto con Mª Isabel Álvaro y Javier Ibáñez) o, más recientemente, Santos extravagantes, santos sin altar y mártires modernos (2019, junto con Eliseo Serrano).

Su actividad investigadora se ha orientado hacia diferentes líneas temáticas, entre las que pueden señalarse tres principales: la arquitectura monástica y conventual, el estudio de las artes figurativas del Renacimiento –pintura, escultura y también orfebrería– y la influencia que el Concilio de Trento (1545-1563) ejerció sobre el arte religioso de la Contrarreforma.

Interesa destacar, en particular, algunas de las aportaciones en las que se analizan aspectos de la nueva orientación que adoptó el arte religioso tras la reforma tridentina, en especial el extenso trabajo que dedicó al panorama aragonés en el marco de la reunión Discurso religioso y Contrarreforma (2005) y el que versa sobre las formas y expresiones artísticas de culto a los santos locales del arcedianado bilbilitano (2016). Asimismo, los artículos sobre la tipología de las capillas eucarísticas y trasagrarios, en especial los de San Miguel de los Navarros de Zaragoza (1999) y San Francisco de Tarazona (2000). Y, por último, diferentes aproximaciones al culto a las reliquias y los relicarios concebidos para custodiarlas y exponerlas a la veneración de los fieles, ya se trate de visiones de carácter general (2008), aproximaciones a la modalidad de los bustos relicario como las que versan sobre los de Santiago y Santa Dorotea de la concatedral de Nª Sª del Pilar de Zaragoza (2013 y 2014) o el uso de la imagen como elemento de propaganda del ideario religioso católico.

Finalmente, entre las investigaciones que ha dedicado a la ciudad episcopal de Tarazona –en la que reside– y su entorno citaremos su estudio sobre los Guaras, una destacada familia de mercaderes y diplomáticos de proyección europea del siglo XVI que edificó un suntuoso palacio junto a la Seo turiasonense (2010) y sus numerosas aportaciones al arte religioso de la ciudad durante los siglos de la Edad Moderna, en especial sobre su catedral.